La necesidad de financiación para las empresas supone el principal elemento para el nacimiento, desarrollo, o viabilidad de éstas. Las fórmulas tradicionales de financiación, principalmente el canal bancario, no siempre están disponibles para todas las empresas.
Por ello, recurrir a entidades como las sociedades de capital riesgo constituye, en la actualidad, una opción más que interesante para que las empresas puedan afrontar su singladura.
En el siguiente artículo analizamos qué son las sociedades de capital riesgo, cómo funcionan, sus ventajas, la diferencia con los fondos de capital riesgo, y veremos algunos ejemplos de cómo actúan.
Qué son las sociedades de capital riesgo
Según la Ley de Entidades de Capital-Riesgo y de sus Sociedades Gestoras, las sociedades de capital riesgo son sociedades anónimas cuyo objeto social principal consiste en la toma de participaciones temporales en el capital de empresas no financieras que, en el momento de la toma de participación, no coticen en el primer mercado de las Bolsas de Valores.
Dicho con otras palabras, se trata de entidades que aportan financiación a empresas, sobre todo pymes y startups, para poder alcanzar los objetivos empresariales que estas tengan. Esta aportación es temporal, dado que el objetivo de estas sociedades de capital riesgo es invertir a un plazo para obtener beneficios para sus accionistas.
Su denominación de capital riesgo obedece a que las empresas que acuden a ellas suelen haber agotado todas las vías convencionales de financiación, como la bancaria, por lo que invertir en ellas puede representar un cierto riesgo.
¿Cómo funciona una empresa de capital de riesgo?
La forma de funcionar de una empresa de capital riesgo consta de tres fases:
- Una primera, en la que se produce la adquisición de la participación en la empresa con el objetivo de mejorar o impulsar su gestión.
- En una segunda fase, la más importante, la empresa de capital riesgo toma cierto control sobre la entidad adquirida con el objetivo de transformarla y aumentar su valor aplicando mejoras en su gestión.
- En la última fase, una vez consolidada la empresa participada y generado valor en ella, la empresa de capital riesgo vende su participación obteniendo con ello un beneficio.
En general, la materialización de estas fases se puede prolongar por un período medio de entre 3 y 6 años.
Ventajas del capital riesgo
Entre las principales ventajas de acudir a una sociedad de capital riesgo se encuentran:
- Acceso a un tipo de financiación difícil de obtener a través de otras entidades o herramientas financieras.
- El capital riesgo impulsará el desarrollo de la empresa en la que participe, no solo mediante la aportación de recursos financieros, sino también con experiencia en la gestión.
- Puede aportar buena reputación a la marca y al negocio.
- Las empresas participadas se vuelven más competitivas.
- Estas empresas también generan y consolidan empleo.
- Acelera el crecimiento de las empresas.
- Mejora de la rentabilidad de las empresas participadas y su capacidad para generar beneficios.
Diferencia entre sociedad de capital riesgo y fondo de capital riesgo
Sociedad de capital riesgo
Según la legislación, las sociedades de capital riesgo son entidades jurídicas con forma de sociedad anónima. Su capital social mínimo para constituirse debe ser de 1.200.000 euros (desembolsado el 50% en el momento de su constitución).
El objeto principal consiste en la toma de participaciones temporales en el capital de empresas de naturaleza no inmobiliaria ni financiera que, en el momento de la toma de participación, no coticen en el primer mercado de bolsas de valores.
Tienen dos formas de actuación. Pueden actuar ellas mismas como sociedades gestoras o bien pueden recoger en sus estatutos sociales la posibilidad de que la gestión de sus activos sea realizada por una Sociedad Gestora de Entidades de Inversión Colectiva de tipo cerrado (SGEIC) o una Sociedad Gestora de Instituciones de Inversión Colectiva (SGIIC).
Fondo de capital riesgo
Por su parte, los fondos de capital riesgo son patrimonios separados sin personalidad jurídica, pertenecientes a un conjunto de inversores. El patrimonio comprometido mínimo, en el momento de su constitución, será de 1.650.000 euros.
Los partícipes del fondo no responden por las deudas del fondo, sino hasta el límite del patrimonio del mismo. El patrimonio del fondo no responderá por las deudas de los partícipes ni de las sociedades gestoras.
La gestión y administración de los fondos recaerá necesariamente en una SGEIC o en una SGIIC.
Ejemplos de sociedad de capital riesgo
Actualmente existen registradas en la Comisión Nacional del Mercado de Valores un total de 389 sociedades de capital riesgo y 25 sociedades de capital riesgo-pyme. La diferencia entre ambas es que, mientras las primeras abarcan cualquier tipo de empresa para invertir, las sociedades de capital riesgo-pyme centra sus inversiones en pymes, empresas con menos de 50 millones de facturación, menos de 43 millones en activos y menos de 250 trabajadores.
Por la parte de la inversión, se pueden encontrar ejemplos de sociedades de capital riesgo como:
- Aquellas que invierten en el denominado capital semilla, es decir, en empresas de reciente constitución, sin aún actividad.
- Las que invierten en venture capital, empresas prácticamente recién constituidas, pero que ya han empezado o planificado su actividad y poseen un alto potencial de crecimiento.
- Otras que invierten en empresas ya consolidadas que necesitan financiación para su reestructuración o para un proyecto de expansión.
- Y hay otras sociedades de capital riesgo que invierten, a su vez, en otras sociedades de capital riesgo o en fondos de capital riesgo.