Un accidente laboral tiene lugar cuando un trabajador sufre una lesión física (cortes, roturas…) o psíquica (por estrés, ansiedad…) como consecuencia del desempeño de su actividad durante la jornada laboral o in itinere (en el trayecto al puesto de trabajo o a casa), existiendo una relación causa-efecto entre el desempeño laboral y la lesión.
Cada año se producen cientos de miles de accidentes laborales en España. Trabajador y empresa deben conocer muy bien cuáles son las maneras de evitarlos y qué hacer en caso de que se produzca uno.
Accidentes de trabajo: ¿Qué hacer en caso de accidente laboral?
En caso de accidente laboral lo primero que hay que hacer es atender al herido in situ y trasladarle al centro de salud de la mutua, aunque si no fuera posible (por estar cerrado o muy lejos, por ejemplo), podría acercarse al centro de salud más próximo y, en caso de que las lesiones sean de gravedad, se le llevaría a un hospital (remitiendo con posterioridad el informe médico a la mutua).
En los accidentes in itinere hay que informar a la empresa del accidente para derivar al herido al centro de salud de la mutua más cercano.
El trabajador deberá contar con un volante de asistencia médica que debe facilitar la empresa, toda vez que en ella recae la responsabilidad de dar parte del accidente en un plazo máximo de cinco días (24 horas en el caso de lesiones graves). En el parte se deben indicar los datos personales del trabajador, la empresa para la que trabaja, la descripción del accidente y los medios que se habían tomado para evitarlo.
El trabajador debe tener una copia de este parte. En el caso de que sea autónomo, él mismo deberá encargarse personalmente de gestionar dichos partes.
Baja por accidente laboral
Si el accidentado causa baja laboral, la mutua se encargará de realizar todas las pruebas diagnósticas pertinentes y determinar en qué momento el trabajador puede recibir el alta. El empleado tendrá tres días para remitir a la empresa el parte médico de incapacidad, emitiendo partes sucesivos cada siete días, en caso de ser necesarios.
Indemnización por accidente laboral
Todo trabajador que padezca un accidente laboral tiene el derecho a exigir una indemnización económica a la empresa por los daños que ha sufrido.
La más frecuente a la que puede acceder el accidentado es por omisión de medidas de seguridad, lo que supone una negligencia por parte de la empresa. Si el convenio colectivo así lo establece, el accidentado también podrá tener derecho a otra indemnización en caso de incapacidad laboral.
Junto con el derecho a acceder a una asistencia sanitaria, por el mero hecho de cotizar a la Seguridad Social, el empresario debe contar con un seguro obligatorio a través de una mutua de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales que es la que pagará las prestaciones económicas correspondientes.
Tipos de accidentes laborales
Se consideran accidentes de trabajo:
- Los que tengan lugar en el lugar de trabajo y durante las horas de contrato.
- Cuando el trabajador se desplaza de su casa a su puesto de trabajo y viceversa (in itinere).
- Cuando un trabajador se desplaza fuera del centro de trabajo para realizar una actividad laboral (“de misión”).
- Los que se producen al realizar funciones de carácter sindical o al desplazarse para realizarlas.
- Cuando el trabajador desarrolla tareas que no le son propias de su categoría profesional, pero han sido ordenadas por su superior.
- Cuando está haciendo labores de salvamento que tengan que ver con el trabajo.
- Cuando el trabajador enferma por la actividad laboral que realiza, y aún no está catalogada como enfermedad profesional.
- Al agravarse una enfermedad preexistente por culpa del accidente ocurrido en la empresa.
- Cuando se produce un infarto, ictus o hemorragias cerebrales como consecuencia directa del trabajo desempeñado por el trabajador.
- Los que sean consecuencia de los delitos ocasionados por el empresario, compañeros de trabajo o cualquier persona vinculada a la empresa.
Seguro de accidentes laborales
Las empresas con trabajadores a cargo están obligadas a contar con un seguro de accidentes laborales. Este seguro está ligado al convenio colectivo al que esté adscrito la compañía y que determina las coberturas e indemnizaciones que debe cubrir el seguro en caso de accidentes, incapacidad permanente o muerte del trabajador.
Junto con este seguro, existe otro seguro que el empresario puede disponer para no responder con su capital de las indemnizaciones, que es el de responsabilidad civil patronal, que indemniza por daños y perjuicios al trabajador que ha sufrido un accidente laboral en caso de que la empresa sea la responsable.
Este seguro cubre por las lesiones físicas o psicológicas, los daños materiales que hayan tenido lugar en los bienes del trabajador o la diferencia de ingresos entre su sueldo habitual y la prestación de la mutua, entre otros aspectos.
Además, el propio trabajador, especialmente cuando es autónomo, puede contratar un seguro de accidentes que le cubre ante incapacidades provocadas en su trabajo, garantizando una indemnización en caso de fallecimiento o invalidez permanente parcial o total del asegurado.
Existen coberturas adicionales, como las indemnizaciones diarias en caso de hospitalización, gastos de asistencia sanitaria y asistencia en viaje.
¿Cómo prevenir los accidentes laborales?
En algunos casos, sobre todo en casos graves o de fallecimiento, Inspección de Trabajo realizará investigaciones sobre las causas y circunstancias del accidente para comprobar si la empresa tomó todas las medidas de seguridad y prevención establecidas en la Ley, ya que en caso contrario podrá recibir una sanción.
Si no hay investigación de oficio, el trabajador accidentado o sus familiares pueden denunciar estos hechos ante la Inspección, para que se realice esta investigación y que se subsanen las deficiencias con el fin de evitar futuros accidentes.
En cualquier caso, tanto empresa como trabajadores pueden prevenir accidentes identificando y evaluando bien los riesgos, realizando cursos formativos sobre ellos al personal y adoptando los protocolos de actuación correspondientes y de obligado cumplimiento para todos.
